Me considero una persona muy trabajadora y persistente, con el objetivo de conseguir la mejora de la salud de los pacientes. A su vez, creo en la necesidad de establecer una buena relación con los pacientes, en la que ellos se sientan escuchados y entendidos, pues la base de un buen tratamiento es la confianza mutua entre fisioterapeuta y paciente.
Establecer una relación con una persona y conseguir que esa persona mejore su salud es uno de los puntos más satisfactorios de mi profesión. El hecho de poder entablar una conversación con plena confianza con el paciente y poder de esa manera conseguir que este entienda el por qué de sus dolores y los objetivos de los tratamientos hace que el paciente se empodere y de esta manera consiga manejar su dolor. Creo que esto es lo que más me aporta en mi profesión.
Una de las preguntas más frecuentes es si el dolor se me va a quitar con una sola sesión. En muchas ocasiones, la principal técnica a utilizar por un fisioterapeuta es la educación. En ese sentido es necesario enseñar al paciente cuál es el camino de la recuperación de su patología en concreto, tiempos de recuperación, intensidad, frecuencia de su dolor, etc. Otra pregunta común suele ser el número de sesiones que se necesitan para recuperar una patología "x". En muchas ocasiones, la recuperación de una lesión está ligada a la realización de terapias manuales o diferentes técnicas por parte del fisioterapeuta, sin embargo, la mayoría de las patologías guardan una estrecha relación con el ejercicio. Por ello, enseño a mis pacientes la importancia que tiene el ejercicio en su propia recuperación y así hacerles menos dependientes de mí y más autónomos.