Si hay algo que me empuja día a día a seguir dedicándome a la fotografía es poder expresar con solo una fotografía lo que otros harían con palabras. Transmitir emociones congeladas en forma de fotografía es lo que de verdad me define. Lo diferente, a veces, marca la diferencia. Y es que conseguir trasladar la idea que tenemos en la cabeza a una fotografía no es solo cuestión de pulsar el botón de nuestra cámara.